Antes de comenzar, dejemos una cosa clara: las opciones de estilo de vida, como consumir alimentos y jugos saludables, son secundarias cuando se trata de prevenir infecciones virales, particularmente el nuevo coronavirus.
Ningún suplemento, dieta o modificación del estilo de vida pueden proteger al 100% a alguien del virus.
La higiene adecuada (lavado de manos, desinfección de manos) y el distanciamiento social siguen siendo las líneas de defensa más importantes contra la propagación del virus.
Esto incluye toser o estornudar en el hueco del codo para evitar la propagación de gérmenes, mantenerse al menos de 2 a 4 metros de distancia de otras personas en público, evitar tocarte la cara cuando estás afuera y lavarte las manos con frecuencia.
Una vez que domines estas prácticas, puedes comenzar a enfocarte en fortalecer tu sistema inmunológico lo mejor que puedas, y aquí hay algunas maneras en que puedes hacerlo:
- Hacer ejercicio regularmente
- Dormir lo suficiente
- Mantente hidratado
- Maneja tus niveles de estrés
- Coma más alimentos de plantas enteras como frutas, verduras, nueces, semillas y legumbres que sean ricas en nutrientes como vitamina C, zinc, selenio, vitamina D, polifenoles y fibra.
Por ejemplo, las manzanas, las zanahorias y las naranjas son ricas en vitaminas para combatir infecciones, potasio y ácido fólico.
Las naranjas son un proveedor conocido de vitamina C, un potente eliminador de radicales libres.
La fresa y el mango son una combinación dulce llena de vitaminas A (como betacaroteno), C y E, así como hierro y ácido fólico. Las semillas de calabaza son estimuladores inmunes subestimados que también pueden ayudar a la salud del cabello, la piel y los huesos.
No olvides las hierbas y especias como el jengibre, la cayena y la cúrcuma, son potencias fitoquímicas.